miércoles, 25 de mayo de 2011

Mis experiencias o fenómenos, como lo llamaría Husserl, en relación al aprendizaje de la historia comulga con Flor y Margarita, como se expresa en el texto de Aurea Valadez, Vivencias e intencionalidad, fenómenos determinantes de la percepción.
   La intencionalidad de mis mentores en mi época de estudiante de escuela primaria no rebasaba la memorización como sinónimo de aprendizaje. Si hubiera ejercido una profesión distinta de la educación seguramente esta reflexión hubiera pasado desapercibida o sería mínima. Sin embargo, a partir de la lectura  de varios teóricos, historiadores, reflexiones sobre cómo se aprende, la reforma educativa, el curso mismo sobre la enseñanza de la historia me han llevado a encontrar otros referentes, perspectivas e intencionalidades sobre la asignatura de historia.
   La historia, los personajes, las situaciones poseen distintas dimensiones de forma y fondo susceptibles de estudio, reflexión, análisis y comprensión que complementaran en gran medida la fecha, el acontecimiento y el lugar que hasta  entonces había sido inmutable del nicho de bronce en el cual se dibujaba.
   Esas dimensiones que se encuentran en las narración es de los abuelos, bisabuelos, canciones, corridos, arquitectura, museos, artes plásticas, novelas, bibliografía diversa, objetos, etc., en ocasiones poco exploradas, tienen reservadas emociones, sorpresas, reflexiones y posturas que, sin duda, provocarán un aprendizaje útil para la vida del individuo. Museo Nacional

viernes, 20 de mayo de 2011

La enseñanza de la historia

La concepción de la enseñanza se modifica mientras se exploran enfoques, perspectivas teóricas y epistemológicas que habían permanecido estáticos o menguados por la labor docente.
  La idea de utilizar la narración como fuente generadora de aprendizaje, reflexión y crítica se retoma en contraposición a la historicidad, al bronce que permea los libros de oficiales de historia en educación básica.
  El sujeto-discente pretender ser la piedra angular de la práctica educativa. Así, la investigación, el análisis, el pensamiento crítico, la alteridad, la confrontación de puntos de vista integran las prácticas de aprendizaje en historia; se vuelven parte de las competencias:
Comprensión del tiempo y del espacio históricos, Manejo de información histórica y Formación de una conciencia histórica para la convivencia.
   El tiempo, las horas clase, el capital cultural, social, la disposición y las expectativas a corto, mediano o largo plazo de los educandos

domingo, 15 de mayo de 2011

Aprendo historia para...

La importancia de la enseñanza-aprendizaje de la historia radica en el conocimiento y
comprensión de las causas que pudieron originar acontecimientos actuales.
   Para lograr estos propósitos en común utilizar en el trabajo escolar recursos como: línea del tiempo, esquemas cronológicos, mapas cognitivos, matriz de inducción, análisis de imágenes y videos, redacción de textos, preguntas guía, lectura de mitos, leyendas, cuentos, elaboración de trabajos plásticos, entre otros. Tales recursos se han ido ampliando paralelamente con las reformas educativas que procuran enriquecer nuestra labor docente´puesto que hace veinte años el recurso más común se reducía a un cuestionario con pregutnas literales estructurado con preguntas a tinta azul o negra y respuestas a tinta roja.
   Estos cambios en el proceso enseñanza aprendizaje ha beneficiado la percepción de los alumnos y su acercamiento a esta ciencia. Aunado a ello, la utilización de Enciclomedia, videos educativos, internet, libros del rincón y de bibliotea escolar han contribuido al estudio de la historia.
   En el trabajo escolar queda pendiente reflexionar sobre el tiempo destinado a esta asignatura por parte de las autoridades educativas, así como el apoyo familiar para el óptimo desempeño escolar y formativo de los alumnos.